El Instituto Mexicano del Seguro Social IMSS es la aseguradora de salud más grande de América Latina. Es parte importantísima en el bienestar de 72 millones de personas. ¿Qué hay en su futuro?
En varias ocasiones me he encontrado comentarios en algunos posts diciendo que los seguros médicos son innecesarios debido a que los mexicanos tenemos derecho a un servicio médico otorgado por el estado a través del IMSS o del Instituto de Seguridad Social al Servicio de los Trabajadores del Estado ISSSTE.
Este tema de platicar sobre derechos puede ser muy complicado. Si todos tenemos este derecho y el gobierno está para hacer efectivos nuestros derechos entonces los funcionarios públicos deben hacer cualquier cosa, lo que sea necesario, para que tú y yo podamos ejercer nuestro derecho.
¿O No?
Para poder dar alguna respuesta a esta pregunta me voy a centrar en la forma más conocida del servicio de salud público. El Seguro de Enfermedades Generales y Maternidad del Instituto Mexicano del Seguro Social, es decir el servicio médico del IMSS.
El IMSS da servicio a 72 millones de personas. Por ello es el mayor proveedor de servicios de salud en México y América Látina.
Empecemos por definir lo que el IMSS ofrece a sus derechohabientes.
Hay que decir que una atención de lo más completa. Los usuarios tienen derecho a un servicio médico que abarca desde la consulta más sencilla, la cirugía más compleja y el tratamiento más costoso.
¿Cómo se paga por todos estos servicios?
La Ley del Seguro Social dice que los servicios del IMSS son pagados por contribuciones de los patrones, los empleados y el gobierno.
En realidad, son los trabajadores, los empleados de las empresas los que cargan la mayor parte del costo.
Las empresas pagan las contribuciones con parte del salario de sus empleados. Y luego las hacen deducibles del pago del impuesto sobre la renta. Igual que lo hacen con lo que efectivamente sus trabajadores cobran.
Mientras que el gobierno paga su parte con los impuestos pagados en buena medida por los contribuyentes cautivos, o sea, los propios trabajadores.
Aunque los trabajadores de las empresas privadas pagan, y pagan bien por el servicio, no son los únicos que se benefician de él.
La distribución de los beneficios
El costo para el trabajador está asociado a su nivel de ingreso, no al número de personas que puede inscribir para recibir el servicio. Así de entrada personas con altos ingresos, los solteros o miembros de familias sin hijos y sin padres dependientes pagan relativamente más.
Por el contrario, ganar (o al menos declarar) lo menos posible o tener seis hijos, un cónyuge y dos padres dependientes parece ser la mejor forma de sacarle provecho al IMSS.
Y luego, tenemos a la gente que se beneficia sin pagar: unos 20 millones de personas.
La explicación para la existencia de diferentes categorías de contribuyentes es, en el discurso oficial, el principio de solidaridad. Los más favorecidos, aquellos que tienen un trabajo, tienen que ayudar a los que no lo tienen. Y eso puede sonar muy bien.
Excepto que….
¿Cuál es la verdadera función de la seguridad social en México?
Nuestros gobernantes entendieron desde la mitad del siglo pasado que en un país con las desigualdades económicos que tenemos y sobre todo con la falta de oportunidades de ascenso que caracteriza a nuestra sociedad tener un sistema gratuito de servicios de salud era una necesidad. Y hay que darles crédito por ello. Probablemente el país ya habría atravesado por severa inestabilidad social si no fuera por los servicios médicos del IMSS.
De lo anterior se puede ver que el IMSS tiene un uso mixto, en parte como una gigantesca aseguradora de salud, y en parte como un sistema de reparto de la riqueza.
¿Qué salió mal?
Con todo y su dualidad de fines, en sus primeras décadas el modelo funcionaba bastante bien porque tenía que enfrentar enfermedades agudas. Es decir, y puesto en términos muy sencillos, para aquellos padecimientos de los cuales las personas nos curamos o simplemente nos morimos. Pero rápido.
Lo malo de esta historia es que tal cosa ya no está pasando. O al menos, no como antes.
Para nadie es un misterio que estamos viviendo más años. Y que como resultado, las enfermedades también van cambiando. Hoy muchas más personas sufren de problemas crónico degenerativos como el cáncer o las enfermedades autoinmunes.
Afortunadamente, el desarrollo de la ciencia médica no se detiene. En un futuro bastante cercano veremos avances espectaculares en la médica genética y la inteligencia artificial que cambiarán la medicina como la conocemos hoy.
Desafortunadamente, los costos de estos servicios van a ser sumamente altos.
El callejón sin salida
La combinación entre usar el IMSS como mecanismo de estabilidad social, el desarrollo de las tecnologías médicas y la dinámica de envejecimiento de la población se está convirtiendo en un callejón sin salida que fuerza a los funcionarios públicos encargados de la administración a tener que elegir entre cuatro alternativas:
- Subir las cuotas de los asegurados que si contribuyen. (Muy probablemente lo que harían sería aumentar las cuotas empresariales, pero esas ya comentamos que en realidad vienen de una parte del sueldo de los trabajadores).
- Aumentar los impuestos a toda la población.
- Cobrar por los servicios que da el IMSS en su servicio médico ó
- Deteriorar la calidad de los servicios
4 alternativas que no le gustan a nadie.
Así es que hay que encontrar una quinta:
Hay que desaparecer la corrupción para aprovechar más los recursos que hoy tiene el IMSS. Esta alternativa es la más atractiva porque no afecta a nadie.
Sin embargo, es increiblemente dificil de poner en practica porque hay mucho, pero mucho dinero en juego.
¿Cuánto nos cuesta el servicio médico del IMSS?
Las cifras de miles de millones marean a cualquiera. En especial, cuando para la mayoría de las personas, un millón de pesos ya es montón de dinero.
Hagamos algunas comparaciones:
Imagínate estas cantidades simplemente en millones de pesos. Como puedes ver en la infografía la reconstrucción después de los dos terremotos de septiembre pasado va a costar menos de la sexta parte de lo que se gastó en el servicio médico del IMSS en el 2016.
Y el presupuesto para los partidos políticos, que es un tema muy controvertido, apenas el 4%.
Así que, como podrás ver, no es poco dinero.
Si tomamos como base los frecuentes titulares acerca de escándalos de corrupción podemos observar una constante. Entre más dinero se pone en manos de los funcionarios públicos parece que hay más incentivos a que busquen formas de necesitar aún más recursos y no a que busquen la optimización de los recursos que ya tienen.
Así que no hay evidencia de que la solución más simple tenga muchas posibilidades de éxito.
¿En la realidad por cuál alternativa se han inclinado los gobiernos que han administrado al IMSS?
Muchas personas tienen historias de cómo los servicios del IMSS le salvaron la vida o del excelente servicio que le dan a algún familiar. Sin embargo, hay una señal muy clara que indica una gran parte de la población percibe que el servicio es malo y se está deteriorando.
El número de asegurados de seguros de gastos médicos privados incrementó en un 93% entre 2005 y 2015. Si te pones a pensar que la población sólo creció un 16% en en ese lapso es posible que llegues a la misma conclusión que yo.
Piénsalo asi:
¿Quién en su sano juicio contrataría un seguro privado?
Estos solo cubren un parte de los gastos ya que el asegurado debe cubrir deducibles y coaseguros. Además, los mejores seguros de gastos médicos pueden costar anualmente para asegurar una familia lo que vale un automóvil.
¿Qué puede llevar a alguien a destinar una buena parte de su ingreso para pagar por un seguro privado cuando tiene derecho, o con relativa facilidad podría tenerlo, a un servicio médico que le da cobertura al 100% de sus gastos?
La única explicación que se me ocurre es que muchas familias prefieren destinar una muy buena cantidad de dinero para garantizar su acceso a la atención médica privada porque no confían en la calidad del servicio médico del IMSS.
Es decir, es muy probable que la alternativa elegida haya sido permitir el deterioro en la calidad de los servicios para no tener que enfrentar los altos costos de tomar las otras opciones.
La constante amenaza
Con cierta frecuencia salen a la prensa declaraciones de “expertos” que dicen que se pretender privatizar el IMSS. Lo cual genera un enorme rechazo de la población.
¿Pero qué es lo que rechazamos?
Bueno evidentemente que nos cobren los servicios. El término privatizar suena inevitablemente a que hay que pagar al dueño, al privado, por algo. Y ya como dije arriba, si asumimos que tenemos derecho a algo no nos pueden cobrar por ello.
Las buenas noticias
Todas esas amenazas carecen de sustento lógico. Ningún gobernante, en su sano juicio, propondría y mucho menos aprobaría cambios a las leyes para que los servicios de salud pública cuesten.
(Por cierto, sano juicio desde el punto de vista político es hacer todas aquellas acciones necesarias para conservar una posición de poder).
Otra cosa que es un temor común entre la población es que el IMSS dejará de brindar tratamiento para enfermedades de alto costo. O que no ofrecerá los tratamientos más avanzados que surjan para la atención médica.
Al menos aquí hay otra buena noticia.
Sería muy poco probable que haya un político que se perdiera de la oportunidad de declarar que el IMSS ofrece tratamientos comparables a los mejores hospitales de Europa y los Estados Unidos.
Así que, por ahí es razonable asumir que no hay de qué preocuparse.
La válvula de escape
Asumamos que el IMSS nunca va a cobrar por sus servicios. También demos como un hecho ofrecerá tratamientos con la tecnología más avanzada. Entonces, ¿en dónde queda la válvula de escape? Mi estimación es que será en el tiempo.
Actualmente ya sabemos que los tiempos de espera para recibir atención ya son de meses. Es muy probable que esas esperas se sigan incrementando hacia el futuro. En unos años esperas de dos meses para una consulta, otro tanto para conseguir un medicamento y cirugías programadas para dentro de dos años pueden hacerse aún más comunes de lo que ya son hoy en día.
Derrumbando mitos
Algo muy interesante ocurre en la mente de las personas que anhelan el poder. Es como si generan una versión plástica de la realidad. Y al ser plástica la realidad es totalmente adaptable.
Jamas nos han dicho:
“Vamos a tener un servicio médico gratuito que no tenemos idea de donde vamos a pagar en el largo plazo. Pero no se preocupen, ustedes no lo pagarán”.
Lo que oímos es:
“Tienen derecho a servicios gratuitos de salud por el simple hecho de ser mexicanos”.
Obviamente no se puede decir lo primero. Hay mucha gente consciente que terminara por preguntar de dónde va a salir el dinero para pagar por esto.
Pero nadie se atreve a poner en duda un derecho. En realidad, el IMSS y el resto de toda la seguridad social no es un derecho, como es el derecho a la libertad o la igualdad entre géneros. Esto es un beneficio. Y el problema con los beneficios es que para alguien lo pueda recibir otra persona tiene que ser obligada a pagar impuestos para mantenerlo.
Conforme el costo del beneficio se va incrementando hay que obligar a los que pagan por él a pagar más y más.
Esta ilusión generalizada de llamar derecho a lo que en realidad es un beneficio afecta el futuro de las familias mexicanas.
La mayoría de las personas ahorramos para estar protegidos cuando nos ocurre algún problema o desgracia. Pero eso cambia si me hacen creer que alguien cuidará de mí y de mi familia.
Nunca escucharas un político que se atreva a decir que los beneficios y prestaciones del IMSS serán eliminados o disminuidos. Pero no confies en eso para planear el futuro de tu familia.
La bola de nieve que se ha ido acumulando simplemente es demasiado grande y de alguna manera nuestros gobernantes tendrán que irla controlando. Y seguro no serán ellos los que paguen los platos rotos.
Fuentes:
Presupuesto en Salud 2017 http://codigof.mx/presupuesto-en-salud-2017/
Proyecto de presupuesto de la federación 2018
http://www.ppef.hacienda.gob.mx/work/models/PPEF2018/paquete/egresos/Proyecto_Decreto.pdf
Informe al Ejecutivo Federal y al Congreso de la Unión sobre la situación financiera y los riesgos del Instituto Mexicano del Seguro Social 2016-2017
Ihttp://www.imss.gob.mx/sites/all/statics/pdf/informes/20162017/21-InformeCompleto.pdf
Reporte Asociación Mexicana de Instituciones de Seguros